Guitarra
Se me hizo costumbre pasear por la ciudad y entrar por las calles retorcidas, llenas de escombros, basura y ver su fauna exótica.
Se me hizo costumbre visitar las plazas solitarias, esas donde reinan los ladrones, esas a las que nadie visita por temor, es gracioso, descubrí que no hay ladrones pues le temen a la soledad.
Te descubrí en uno de esos viajes (quiero ser sincero, por que hay criaturas tan especiales que uno no las llega a conocer, uno las descubre),
estabas sentada en la rama de un árbol, tocabas la guitarra, se notaba que estabas agradecida y tu amado, enviaba un suave viento para acariciarte.
Me quede escuchando, atento, algo me llamo la atención, no se... Tu música, el árbol, su sombra, el viento...tu... no te diste cuenta de mi presencia hasta que aplaudí y te asustaste; una ráfaga de viento tumbo mi sombrero de viajero y te hiciste humo de colores, dejando tu guitarra en el suelo.
Se me hizo costumbre pasear por la ciudad y descansar bajo los arboles, preguntarle al viento si sabe donde estas, para devolverte tu guitarra... miento... para volver a verte.
Kuei22 de mayo de 2010
