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Lastima Eterna

Un asesino en serie escondido tras la mascara de rostro sin penurias.
Una parálisis le impide otorgar todo lo que esta brindado a dar.
Malformado por sucesos que lo impiden llegar al final, ríe en el medio del velorio de aquel familiar perdido. Con sus gracias hace olvidar que existe la muerte.
Si el mismo que ocupa el féretro parece sonreír ante sus ingeniosidades.
Hace olvidar esos momentos abatidos con suma facilidad, algunos se dejan engañar pensando que es un ingenuo o tal vez esta siempre en la escena equivocada. Pero no necesita hacer oídos sordos a esas conclusiones, y si tuviera que encerrarse en dichas palabras, siempre encuentra una puerta para poder salir.
Pocas personas puede llegar a siquiera imaginar las cosas que transcurren por su mente.
Esta rodeada por rutas que no llevan a ningún lado. Se perdió en las explicaciones y se canso de escuchar la última voz.
Se olvido de sentir, en su corazón no existe la amargura, sin ser rebuscado solo deja de pensar, existe en el tiempo, y el tiempo no existe para el, no disiente entre el domingo y el viernes. No tiene requisitos fijos a la hora de poderse mostrar.
No necesita mentir ni enfocarse en algo totalmente absurdo para poderte robar, con palabras poco complejas trasluce frases que algunos logran entender. Al fin y al cabo el recorre las bocas con su voz y las transforma en lo que todos menos él llaman sonrisas.
Este personaje extravío la ductilidad de mover sus labios en esa forma, debido a eso es que ama tanto alegrarte.
Los periodistas no pueden entender su engendrado espíritu, algunos se sorprenden al no poder sacarle nada emocional en el medio de las entrevistas, le preguntan de su familia, él no tarda en llamarlos, les muestra como conviven juntos, el aura de esa casa no puede estar en mejor sintonía.
Contra respuesta sobre el trabajo, un poco desacertada por el clima familiar, en ese conjunto se observa que al parecer no hace falta nada.
Insistente como los demás, pero se da cuenta que en el amor, no vale la pena preguntar,
Ve como su esposa lo atiende en todo y esta siempre bien predispuesta.
Sin saber que preguntar se va sin obtener mucho menos ni más que los demás que quisieron interrogarlo.
El sale al jardín de su casa, mira ese punto fijo, que solo pueden ver las personas que están saturadas, se arrodilla en el césped ya sin poder mantenerse de pie.
Sus ojos se cierran y se abren en ese frenético segundo donde pasa toda su vida.
Luego de cumplirse el deseo, decide hacerle caso al destino. Despierta del sueño y se va con el ángel hacia el paraíso. Dejan el ataúd vacío nuevamente partiendo en paz.
Pamfleto22 de octubre de 2008

2 Comentarios

  • Mejorana

    Escribes muy bien Panfleto.
    Con el tiempo conseguir?s hacer algo bueno.
    Saludos.

    22/10/08 10:10

  • Chistoffer

    muy linda la parte de jesus

    01/12/08 08:12

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