Con su amor vestida, salió a la calle. Un rayo de luna la tomó de la mano y el manto de una noche
cargada de estrellas envolvió con dulzura sus pasos. Persiguiendo sueños, escapó en busca de los
besos...
Sigo observando mi trocito de cielo a través del tragaluz del techo de mi dormitorio. Intento fijar
mis ojos y mis pensamientos en la cálida luna y navegar muy lejos en ese inmenso océano de
estrellas...
¡Hola! Somos una comunidad de escritores aficionados. Nos reunimos aquí a mostrar y comentar nuestros textos. Descubrimos nuevas historias y nuevos amigos cada día. → Únete para participar