Piensa en las primeras notas de aquella canción que te hizo amar la música. La cadencia de la melodía sincronizada con tu pie, como si tocaras un bombo, como si fueras el batería de la banda. Piensa en, no sé, la primera lluvia que rozó tus mejillas. Todos corriendo a resguardarse del torrencial y tú, mirando al cielo, disfrutando de las gotas sobre tu cara. Y es en ese momento donde te acuerdas de aquella escena de Cantando bajo la lluvia y vuelves a sentir la emoción que tuviste al ver a Gene Kelly bailar con su paraguas. Corres a por el tuyo para imitar los pasos del primer musical que viste en tu vida. Seguramente parecías un pato mareado y, al contrario que en la película, tú si que pillaste un buen resfriado, pero nadie te robará aquel momento.
Cuántas veces no hubieses querido olvidar esos recuerdos para volver a tenerlos una y otra vez y sentirlos con la misma intensidad. No sé si a vosotros os pasa, pero maldigo los buenos recuerdos, te dejan vacíos cuando pasan a ser parte de tu memoria y buscas volver a tenerlos, pero pocas veces vuelves a sentirte tan bien. Y quizá sea esa búsqueda la que hace levantar día a día a las personas, la de un nuevo recuerdo. Cada día estoy más seguro que adoramos flagelarnos, ligamos nuestra memoria a instantáneas del pasado, a canciones, a cualquier objeto y ya son casi parte de ti. Las miramos cuando estamos tristes, añorando ese cuando donde fuiste feliz y por un momento se dibuja una sonrisa en el rostro hasta que te das cuenta que no puedes retroceder.
Después de esta tarde me ha entrado un poco de miedo, porque, al igual que cuando descubres el sabor más dulce, no sabes si volverás a saborear algo así. Siempre desearé volver a conocerte. Primero porque me recordaste lo que era descubrir cómo es alguien y conseguiste ser el sabor más dulce. Segundo, porque serás el límite que busco superar. Y lo último, serás el recuerdo que veré cuando haya horas bajas, para torturarme por no poder revivirlo.
Es en este momento donde surge la duda qué mas temo y por la cual conocerte me ha provocado miedo: ¿el deseo de volver a sentir aquello que tuvimos tú y yo será aquello que nos separe o nos mantenga unidos?
Entiendo porqué estuviste un lapso de tiempo conmigo, eres profundo, por un momento me vi reflejado creyendo que era yo. Gracias por escribir de una manera tan bella.
