En verdad lo perdido son castillos en el aire, que se construyen por la noche y desparecen con las primeras luces del alba. Hay que perder el miedo, ser capaz de andar, a pesar de los ruidos desconocidos y del fantasma de la soledad, que nos sirve de guia.
Buen poema.
Un saludo.
27/07/14 05:07
No tengas miedo, Alatiel, el camino es largo y está lleno . Y cuando una aventura se termina, otra ventura empieza incluso más apasionante que la primera.
La vida hay que vivirla con todas sus consecuencias. Que no tenemos otra, y en caso de que la hubiera no la recordaríamos.
Un beso de salutación.
27/07/14 06:07