solo mi muerte te abrira los ojos, muerte
de tu rutina incendiaria
de su cura falseada
tu ignea desmemoria de surcos desmembrados en el mar de furibundos brazos crucifijos de estiercoles a punta de raices de acordeones sonrojados
no soñare mas con los hilos que urden las miradas
me da iguial si hablas o te incendias, vendame los dos
ojos
si digo que vivo en marquetalia ni yo mismo me creere,
el problema esta en que vivo aca
mi cabeza se parte en dos, en cuatro, en cinco
lo que sea necesario ¡oh locura ahorcada! para darle la bienvenida a una bala
los trazos malhechos que me dibujan se emborronan y prostituyen para formar palabras como: agujero, lento, solamente...
las insurgencias y rebeldias se pagan con rendiciones, las decencias y sombras aqui se pagan con excrementos.
canada esta lejos
la vela trémula, juega con mi sombra
incredula hija del alquitran, ni se imagina
que ando con los dedos cargados.
