Ella:
Con su blanca palidez y una de sus alas dañadas, se detiene a descansar sobre un muelle aquel ángel que lucha contra todos los males
El:
Criatura de la noche con ansias de encontrar una presa, vaga por los mundos esperando se cruce su victima.
El la ve allí dormida e indefensa sumergida en el sueño, la recorre con su mirada
Contempla su belleza, recorre su cuerpo
se toma su tiempo
Como el mejor cazador silencioso y sigiloso busca la parte más débil para cumplir su cometido
El aroma a jazmines que ella desprende, aletarga su instinto asesino
El dibujo de sus labios se convierte en hechizo, los recorre temeroso por la debilidad que le produce su sentido.
La sangre de un ángel es un néctar que no resisten los vampiros, un poco de ella le bastaría existencia eterna
Algo frena su propensión
¿Que tiene ella que duerme su naturaleza
?
El no se quiebra ante la belleza, nunca
Siempre ante la lindeza resiste con fuerza
¿Qué pasa con este ángel?
Ella esta herida, casi presa fácil que cualquier oscura alma anhela
Cualquiera preguntaría ¿Qué esperas?
Despeja su mente irrumpe su esencia
Cuando esta por clavar sus colmillos
Ella despierta
Abre débilmente sus ojos, claros como el mismo cielo
El se atormenta
Ella lo mira con piedad, acaricia su rostro y le esboza una sonrisa
No teme morir
No opone resistencia
El rompe a llorar algo le impide hacerlo, sale corriendo pero la luz del amanecer lo debilita
Cae entre las rocas como flor en otoño inerte
Ella también perece
sabia que partiría
Pero en su rostro se dibuja la más bondadosa expresión que un alma habita...
El volverá con otra cáscara a la vida
Ella reencarnara
Y despojados de todos
quizás en esta nueva existencia salden la deuda de este momento y se puedan enamorar
Dedicada con toda humildad para Abyssos