Cuando el corazón late
más deprisa,
llenando las horas
con un constante grito.
Cuando las llamas del amor
queman los miedos.
Entonces corre por tu vida.
Besos y palabras,
susurros y secretos,
entre las sábanas se enredan
perfumando con desesperación,
las horas nocturnas.
¿Dónde esta hoy el palpitar
que ayer marco el ritmo de mis pasos?
¿Dónde está aquello que lleno mis manos?
Arena tirada al viento
las promesas de amor que ahora me condenan.
El perdón que nunca llega.