Corrí con la mala suerte
de haber nacido en el siglo
de la incomprensión.
- Al menos no nací en pleno auge
de la guerra armamentística.
Entre tantos disturbios,
guerra santa,
punk,
drogas,
y el Imperio Falaz que nos U.S.A - para disimular-,
sólo deseo elevar mis pensamientos
donde nadie los pueda divisar.
Los enviaré en palomas blancas,
grises,
de cualquier color.
Los deseos que se encontraban en la intemperie resucitan.
Es hora de desempolvarlos,
como vinilos de Frank Sinatra,
y que respiren;
quiero que vivan lo que nunca he vivido.