Penélope nunca muere, la araña sigue tejiendo. Es su sino y sin el no puede sobrevivir. Triste jaula la de Penélope, anclada para siempre a su telaraña, cautiva de su propia razón de ser.
Un precioso poema que atrapa al lector entre sus hilos.
Un saludo, Beth.
25/08/14 08:08
Por desgracia para ella, así es, nunca morirá del todo. Saludos cariñosos y gracias por leer
25/08/14 08:08
Beth
Horas lentas como mareas...el pie se imprime sobre la arena y la resaca borra su arma.. es una titánica la de Pelélope y la de Ukises.
Buen poema,
Saludos
26/08/14 10:08
Todas en un momento de la vida,somos Penélope,y aunque a veces no cansemos , hay seguimos.Un beso cariñoso.
29/08/14 03:08