De nuevo como en un sacrificio
he vuelto a ofrecerte
mis lágrimas
como gotas de rocío que
en ti se derraman por
la mañana, apenas mis pies
se encaminan, vacilantes,
a tu llamada.
Desearía que el torrente
se secase de pronto
y que en mi vida no cupiese
ya más que la paz y la calma.
Pero entonces quizá no
sería yo, la misma
que sufre día a día
hasta no entender ya
lo que es la esperanza.
Sería una mujer distinta
de la que viese a diario
en el espejo su cara,
y perdería de tu amor
la memoria,
moriría, quizá, dejando
derramar mi sangre
en la distancia
Quizá... sí... tal vez a sí sería. Pero ¿por qué no averiguarlo?
Unas hermosas palabras las que nos compartes y bueno ya que hablas de sacrificio, me recordaste una canción que te quiero compartir. la pongo a parte, por si no es de tu agrado y la puedas borrar sin dejarme fuera jejeje saludos querida amiga!!!
Ay David, ¿tú crees que yo eliminaría alguna canción que me regalases tan generosamente? Te lo agradezco mucho, es hermosa. Yo en mi blog también puse una canción
De nuevo como en un sacrificio
he vuelto a ofrecerte
mis lágrimas
como gotas de rocío que
en ti se derraman por
la mañana, apenas mis pies
se encaminan, vacilantes,
a tu llamada.
Ese aferrarse a las lágrimas porque nos quedamos con ese protagónico y no nos atrevemos a probar otro yo. Lo has reflejado a la perfección.
Un gusto, Beth
Yo creo que estás muy bien como estás, Beth, aunque ofrezcas lágrimas como sacrificio. Pero ésa es tu esencia y también tu presencia. Precioso. Un beso.
Un poema de lamento...................siempre las mujeres tienden mas que los hombre a llorar??? los hombres tambien lloramos beth y muchas veces peor que ustedes........sufrimos por mucho lo unico es que no lo demostramos en muchas ocaciones............creo que eso nos hace frios.....saludos
Puede que tengas razón, Singer, el dolor y el llanto no es privativo de las mujeres, aunque a veces tendamos a apropiarnos de él. Saludos cordiales y gracias por tu presencia