Hay veces que te levantas, y lloras. Por lo que sea. Incluso, muchas veces no hay ni siquiera un motivo para ello. Entonces, ¿porque lo hacemos? No se, quizas porque,realmente, si hay una razón, quizas porque lo necesitamos, quizás, quizás..y quizás nunca más.
No se muy bien la razón, pero a veces, me paro y lloro, con o sin motivo, pero lloro. Así, al menos, puedo desahogar mi alma.
Yo (y los rusos) le llamo "toskà". Me dolió un poco, a veces también me siento mal sin razón. Lo importante es que después de las lágrimas uno sonria mucho. :)
Llorar limpia como lo hace la lluvia, y hace mucho bien, las razones no importan, uno no piensa cual es la razón de una necesidad, simplemente la satisface. Saludos