Nunca supe lo que es la soledad, hasta que mi mente empezó a martillearme con las punzadas de los pensamientos, los recuerdos, lo que hay que hacer, lo que está hecho, lo que no está hecho, lo que está bien, lo que está mal.
Sin parar de recordádmelo sin parar de repetírmelo, todo cruzado, todo confuso, haciéndome que me falte el oxigeno, sin dejar descansar mi cerebro, como un carpintero que no para de dar golpes con su martillo.
Haciendo crecer un nudo en mí estomago que crece y me oprime, que me hace sentirme enfermo, pero que no oprime lo suficiente para dejarme moverme, lentamente como un zombie sin rumbo, sin sentido, sin necesidad.
Todo es gris, oscuro triste, mi vista es nublada, mi nariz esta reseca, mis oídos me zumban, mis labios agrietados, mi boca seca, mi lengua escondida, las palabras desaparecen, los sentimientos se ocultan, la vida se para.
Las personas son murmullos, bultos que se acercan y se alejan, que estorban, que se rozan, que te miran, que van, que vienen, como un remolino de viento, girándote, enredándote, haciendote perder tu rumbo.
Lo único que me hace ver algo la luz, es cerrar los ojos, no pensar en nada, no hacer nada, no creer nada, no oír nada, solo mi corazón latiendo notando como baja el ritmo y como poco a poco regula el control de mi cuerpo.

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2 Comentarios

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  Alis

  Me reconozco en esto, a mi también me pasa, tu lo explicas divinamente.un saludo Bonix 25.

  25/09/16 09:09

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  Bonix

  Gracias por comentar, Alis, pero recuerda que siempre es mejor la luz a la oscuridad, aunque la oscuridad intente atraparte, siempre hay que aliarse con la luz.
  
  Un saludo.

  05/10/16 11:10