La noche desvió el curso de mis andares
Las ondulantes nieblas estelares fluctúan
Y se separan cual gotas de hidrogeno congelado
Así como congelado tengo el corazón
La luna desea ocultarse para dar paso al sol
Mientras yo insomne sigo pensando en ti
Mis ojos encostrados de lágrimas ionizadas
Que cuajan mis recuerdos lastimeros por ti
Y cuando la agonía pulula en mis adentros
Como golpes que aniquilan el anhelo de verte
Y el canto de los grillos causa grietas que envenena
Esta mente que ya estaba envenenada de tu ausencia
Al ritmo de las palmeras que con el viento austero
Bailan en sincronía sepulcral cual nocturno romance
De pronto el destello de un rayo que parte en dos
La dantesca oscuridad y da paso al amanecer
Amanecer que entras a mi vida y la renuevas
Dándole su última oportunidad de ser feliz
Brillantes destellos que cauterizan la maldad
Dejando ese halo de luz cual esperanza benigna
