Las luces de los cielos inundan los ojos de los visitantes al cafe.
Los olores que allí se encuentran, llevan a mil viajes los pensamientos que en el beben.
Un frio de un día soleado penetran los cuerpos de sus participantes y allí las caricias se hacen más fuertes.
El aroma de tu cuerpo, el aroma de tus besos, una respiración profunfa que lleva al extasis infinito de tenerte cerca.
Una cercania que se ve morbosa por aquellos que en este café se sientan. Pero me tientan tus besos, me tientan tus caricias, me tienta tu olor. Y aunque este frio verano nos una, el día en que se acabe el sueño, el sol brillará...
Brillará para que mi delirio, este inutil delirio de tenerte, acabe de una vez ya
CAMILA MORENO G. 27/Agosto/2010
