¿me Acompañas?
Está bien eso de ponerte los cascos y observar a tu alrededor. Ver movimientos locos, adivinar pensamientos o intuir conversaciones de desconocidos. Pero, ¿sabes qué está mejor? Desaparecer. Desaparecer mentalmente. Tu cuerpo sigue ahí, donde quiera que tu estés; en cambio, tus pensamientos se deslizan lentamente por lugares inimaginables... Galaxias relativas, o incluso, universos paralelos. Vuelas, y mientras tanto, notas como todo fluye. Lento y despacio, suavemente. Es por eso por lo que desaparezco a diario.