La política de usura
transmuta toda carrera
en una ascensión oscura
surgiendo de la chistera.
La política altanera
demuestra poca cintura
cuando cruza la barrera
que conduce a la ruptura.
La política twittera
que no tolera censura
es como el fuego en la hoguera
devastando la cultura.
La política de cera
es endeble e insegura,
una auténtica quimera
atentando a la cordura.
Politica cicatera
con quién practica mesura,
mientras vacía la cartera
con quién lo gasta en pintura.
La política certera...
la política de altura...
desde hace ya años espera
a que irrumpa esa figura
que de una o de otra acera
ande la legislatura,
que solucione y no muera
por la posterior abjura
del que espera en la frontera
de ley y judicatura
bien abierta la chequera
para su única ventura.