Amor a Distancia.
Y si hoy estoy aquí para hablar contigo, me han dicho que si digo unas buenas razones me entenderás y pondrás de tu parte.
En estos dos años he tenido momentos buenos y malos, como todo el mundo.
Tengo familia, la más numerosa y la más bonita que alguien puede desear..tal vez haya sus más y sus menos, pero es una familia. También tengo amigos, los mejores sin duda alguna. Amigos que pese hablar poco y vernos menos, están ahí. Alguno ha echo más cosas por mi que otros, pero son míos, mis amigos.
Tengo mi propio ángel, es pequeño y a la vez tan grande..tiene un corazón que no le coge en el pecho, unos ojos marrones oscuros y una preciosa risa contagiosa que puede hacerme reír hasta llorar. Tiene unas grandes alas blancas y tan bonitas..justo las que se merece, las que le dieron por haber sido la perfección en persona. Por habernos echo ver que siempre hay alguien en peores situaciones que nosotros. Nos quejamos por todo, por el dinero, porque nuestro pelo no nos gusta, porque no estamos conformes con nuestro cuerpo ni con nada de lo que tenemos. Él era feliz con lo que tenía y con lo que era, y yo, yo me siento orgullosa de haber tenido la misma sangre que él.
Y solo me falta una cosa, esa cosa que tú me quitas y, que sin ninguna razón no me quieres dar. Es lo que me falta para ser feliz al 100%, es la gota que colma el vaso de la felicidad. Tiene nombre y apellidos, ambas sabemos cuales son. Y ahora la pregunta es ¿Por qué haces todo esto? ¿Por qué haces que pase los mejores días de mi vida a su lado y luego me lo quitas? Sabes perfectamente donde tengo esa espinita que es la única que me hace llorar, esa espinita en forma de botón que al tocarlo, haces que llore y lo pase mal. Solo tú sabes donde está y que durante este año no has dejado de presionar. Pero ante todo esto, quería decirte que desde lo que pasó en febrero él ha sido el único que me ha echo olvidar el tema durante todo el fin de semana, que sonriera y me sintiese la mujer más feliz del universo.
Desde el primer día que hable con él supe que era algo más que un simple persona de internet, desde ese momento sabía que iba a ser una de las personas más especiales con quien compartiría risas, lágrimas, abrazos, besos y amor. Y así fue. Quien lo diría..que después de meses y meses hablando por aquí, que recorriese tantos kilómetros para verme. Quien diría que en un simple fin de semana llegaría a quererle tanto.
En este fin de semana me di cuenta de tantas cosas...la más importante de todas, que quiero compartirlo todo con él.
Verle por primera vez allí de pie, ver como descendía las escaleras y se dirigía hacia mi sin dejar de mirarme a los ojos. Ya le tenía delante mía, cara a cara y esos ojos verdes a los que miré una y otra vez hipnotizada por el brillo que desprendían y de la manera tan bonita que me miraban. Estar abrazada a él, ver como el río pasaba detrás de él, acariciarle la cara, mirarle a los ojos y decirle dos palabras tan simples como un "te quiero". Besarle una y otra vez mientras me acariciaba el pelo y entre beso y beso no dejaba de repetirme que por fin estábamos juntos, que tanta espera valió la pena.
Agarrarle de la mano y acompañarme a casa bajo la lluvia, pensando que tarde o temprano tendría que volver a su casa, a su cuidad..a 500 kilómetros de mí. Pero en ese momento no ganaba mi cabeza, ganaba mi corazón al decirme que aprovechase esas 48 horas para estar con él, pasarlo bien y ser solamente de él y de nadie más. Caminar con él agarrada de la mano y mirarle de arriba abajo y pensar "Está aquí, ha recorrido tantos kilómetros solo para estar contigo". Eso hacía que cada minuto tuviese la necesidad de besarle, abrazarle..
Solo faltaban un par de horas para que se fuese y allí estábamos nosotros, llorando como idiotas pensando que tendríamos que volver a la puta realidad, a esa realidad en la que él está lejos de mi y yo de él. En la que solo es posible un teléfono, un ordenador y unas simples fotos...en la que las manos y los labios no son posibles. Esa asquerosa realidad del día a día. Teníamos TANTAS cosas planeadas...TANTAS que al final no hicimos nada como quien dice. Pero aún así estar a su lado me bastó, me bastó para ser la mujer mas feliz del mundo durante unas horas. Las mejores horas, el mejor fin de semana, los mejores besos, abrazos, caricias, te quiero's y sobre todo..el mejor hombre. Y que de verdad, me ha echo sentir maravillosa y afortunada.
Y esas son las razones por las que estoy aquí, por las que yo ahora mismo estoy con las lágrimas sobre mis mejillas, con una canción que me recuerda a él como miles más y ahora quería preguntarte lo siguiente..
+Distancia,¿ Por qué eres tan hija de puta?
