Tengo ganas de llorar palabras que a pronunciar me niego
De acallar los versos que lanzó al viento
De gritar las lágrimas que por vergüenza doblego
De arrancar mi piel a tiras por el desaliento
Tengo ganas de lanzarme al barranco
Y olvidar mi nombre y enterrar el llanto
Ahora que los colores se han teñido de blanco
y el vacío y la nada inunda mi canto
Tengo tantas ganas de huir y dejar de estar inmóvil
De olvidar mi existencia hasta el punto de reconocerme
De sujetar mi cabeza en un momento frágil
Y tenderme la mano hasta que pueda sostenerme
Tengo ganas de gritar al viento que existo
Que estoy sonriendo aun teniendo el rostro empapado
Que estoy saliendo del fondo en el que subsisto
Y estoy avanzando aún estando encadenada al pasado
Estoy cansada y por eso grito
Y maldigo y escupo y me enfrento al viento
Al silencio que es distinto
Al dolor que baña mi añil esqueleto
Mi desmembrado corazón cansado de fingir
Salió huyendo
Del pasado, del presente ahogado
Del futuro incierto
Mi oscuro corazón echo de óleo pintoresco
Desgastado y disgustado
Desechado en el desierto
Mi delgado corazón
Reconstruido y agrietado
Por silencio, por desvelos
Mi sangrado corazón
Desesperado
Esperando sobrevivir
En pleno enero
