La excesiva perfecciòn de tu boca es casi bochornosa
Tu existencia desentona a cada paso que das con la de los demas,
Tan ordinarias y discretas.
Los ojos zafiro y la piel lunar
Son los complementos de una corporeidad que raya en lo absurdo,
Y con la cual el hombre pedestre no podria ni siquiera soñar.
Cuan soberbio seria de mi parte si esperase que recitaras poemas
o me platicaras de filosofia, si quisiera remendar lo roto junto de ti,
o vivir a tu lado aquella vida utòpica que deseo alcanzar.
Lo finito sabe a gloria cuando se reconoce a cada segundo, con cada suspiro Y en cada poro.
Sortiemos la realidad antes de que esta nos prescriba
Saciemos el hambre que esta vez no se convirtio en amor.
Que esta vez huele a Malbec, pero que sabe a menta.
"saciemos el hambre que esta vez no se convirtio en amor"...