La flor es aún un botón,
y ya embriaga su perfume,
a su padre que presume,
llamando a su hija Allyson.
Por debajo de la piel,
que te separa de mis besos,
se encuentra ese angel preso,
y sus padres esperando por él.
Sus patadas, un sutil toque,
cual caricia que se solicita,
y yo loco por ver su carita,
y cargarla en mi regazo.
Ya antes de nacer los niños lo llenan todo de alegría.
Muy bonito tu poema Dario, y precioso nombre Allyson.
Enhorabuena si vas a ser padre, un abrazo.