Una ida a sagrado,
turista acusado
pero jamás aprehendido,
pues entre gañanes
rodeamos con mucha flema
el deshonor que correspondería
al acto de la incapacidad
de copar en tinta las ideas,
de herir por mucho la presente,
de romper acuerdos suscritos.
Musa, musa de mi vida
¿Dónde te has ido?
Ni entre copas te encuentro
abrigar los sueños del ayer,
corromper la templanza
digna de los menguados,
facilitar el camino fácil
que nos lleva al amor