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En una realidad donde la mitad de la humanidad duerme, solo la mitad de la mitad es capaz de traducir en palabras el susurro al cual yo llamo tiempo: esos golpes al cuerpo que lo desgastan, esa especie de viento que nos conduce al desierto, eso que jamás podrá ser redactado de manera exacta, esa poesía siempre incompleta
Es imposible hablar de poesía sin hablar de muerte y tiempo, esos dos aliados invencibles: dueños de la materia y su destino, del día y la noche, de nuestra humanidad medio dormida, de aquel sueño sin bostezos
dueños de la apariencia y de este mundo.
Una de las mitades no dormida rige al mundo que nadie nos regalo, sueñan despiertos de una forma superficial, son la gota origen de las ondas que mueve la realidad-, nosotros somos el océano inmensidad y aparente calma, el tiempo es la luna dueña de las mareas- y la muerte el sol causa del ciclo del agua-. En esta especie de metáfora guardo a muy grandes rasgos un esquema de nuestra existencia , lo más simple, lo que cualquier ente aprendería de forma sencilla, el contenido del resumen tras la película
pero a partir de aquí entra en la partida nuestra alma, conciencia, ideas... como la llamemos, de este punto en adelante cada ser podría crear su historia partiendo de la representación anterior, cualquier lector sería capaz de destruir o reinventar lo antes leído, cualquiera podría ser el creador de las olas sin pensar jamás en el viento, cualquiera podría indagar en la isla que yo jamás imagine rompiendo así el balance de lo propuesto y viéndose en la necesidad de buscar explicaciones o bien despertar. Cualquiera; podría ser cualquiera la idea que haga de las palabras alma y al alma la transforme en palabras, cualquiera podría soñar dentro de nuestro sueño y crear algo tan propio, que unifique a la luna y al sol en un eclipse total, cualquiera podría desafiar al tiempo y a la muerte haciéndoles saber que aquella mitad de la mitad despertó y ahora le permite soñar a su alma.
La poesía es el eco de las voces que no merecen ser calladas, la poesía no tiene tiempo y no conoce la muerte, la poesía es el cielo o bien el infierno, la poesía jamás terminara, porque nosotros no veremos nuestro fin, la realidad es poesía de tiempos pasados
Esta es la importancia de la poesía, que jamás será lo suficientemente perfecta pero afectara la superficie de los que son capaces de soñar en menor o mayor profundidad.
