Acariciando tu Alma
27 de diciembre de 2017
por diegozami
Has partido de mi vista y de todos mis días mi gran amiga de todos los momentos, mas nunca podrás partir de mi corazón.
Buenos y malos momentos inseparable fuiste, fiel a ciegas, eras más presente que mi sombra, la vida nos invitó a festejar la vida juntos por casi nueve increíbles años, jugando como niños me llenabas de alegría.
Compartimos juegos, descansos, paseos, miedos, y principalmente mucho, pero mucho amor.
Has partido, pero me dejaste lo mejor de ti, todo está grabado en mi corazón, un corazón que arde, que te busca con mis manos, esas manos que se guardaron las mejores caricias en mis entrañas, estas por todo mi ser, y sigo lleno de ti, aunque ya no pueda tocarte, ni respirar junto a ti, sales por todos mis poros, igual que el jadeo luego de tus incansables corridas por la playa en mañanas increíbles.
Duele, y siento que mi pecho esta por explotar, pero prefiero en este momento tan difícil darte las gracias mi amada mascota por tanto amor y tantas alegrías.
Tu amor en tu último aliento de vida me desbordo el corazón, fuiste tan fiel, pero tan fiel amiga, que tus ultimas fuerzas fueron para despedirte en los pies de mi cama, ahí quedaste inerte, en un silencio casi eterno, y decidiste dormir para siempre a mis pies.
En ese instante me permitiste acariciar tu alma, tu ultima demostración de amor incondicional, los dos nos miramos, y en paz me regalaste tu última mirada cerrando finalmente tus inolvidables ojitos para siempre, gracias Sasha, mi querida mascota por tanto, pero tanto amor.
1 Recomendaciones
Soledad1537 lecturas, 6 comentarios, 1 lo recomienda
Ayer2047 lecturas, 5 comentarios, 3 lo recomiendan
Era tan pequeñita, una bolita de pelo cuando la vi por primera vez. La he visto en tu texto y no he podido evitar emocionarme, comparto cada una de tus palabras, nos dio tanto amor. Cuando se fue, hace tres años, dejo entre nosotros como su esencia, la sentía a mis pies y aun hoy creo escuchar, en ocasiones, sus pasitos al caminar.
Precioso como lo has escrito Diego ¡sigo emocionada!...
Un saludo.