Indigo
Buenos días.
Has mencionado a la mujer, ella, la compañera, la esposa. La forma de expresar sobre ella es la correcta, posiblemente con ligeras diferencias a mi criterio, es probable, no conozco del todo tú trayectoria, no obstante me percato que le entregas lealtad.
Completamente de acuerdo contigo.
Asumo que eres cristiano devoto, seguidor de Jesús y su enseñanza, (lo sobrenatural que pregonan las religiones sobre Jesús son mitos o teorías, nada creíbles por mi y observo la otra versión, la que tu sustentas. Jesús en todo caso es un personaje histórico y la enseñanza es una: El respeto a si mismo para que yo reciba el respeto de los demás. Eso es lo correcto, es un axioma para mi, es universal a mi entender. Con desatinos que surgen frecuentemente, caigo en contradicción, como le ocurre a todo humano sin excepción, procuro cumplir ese respeto conmigo primero, pero a veces he fallado.
A Jesús le doy un origen terreno, nació del vientre de una mujer, fecundada a priori por un ¿espermatozoide? ¿o por inseminación divina? Ambas cosas, el proceso, acto sexual, el realizarlo, independientemente que quede preñada la mujer, es divino, es hermoso, es celestial.
Exactamente igual al hombre, aprecia la mujer el acto amoroso, es divino, celestial, hermoso.
(Quedan las personas de preferencia diferente al género masculino o femenino, eso lo puede definir otro/a, con más precisión)
Justamente esa es la muestra en que palpo de que todos, absolutamente todos somos tan humanos, tanto como lo fue Jesús y que todos tenemos ese halo de divinidad (o racionalidad, alma, amor, espíritu, conciencia, sabiduría, albedrío, etc. como lo llamemos).
Interpreto de tu escrito que la divinidad es un atributo o privilegio que se nos entrega desde un ser superior, omnipotente, a través de Jesús, o por los representantes de dios en La Tierra los sacerdotes.
Un ser divino nos entrega divinidad por intermedio de otro humano. Rechazo rotundamente eso.
Entonces razono a mi manera y es cierto y estoy convencido que el amor es la divinidad, la porción que me corresponde me llega de la naturaleza femenina, de una mujer, admito que dios es la mujer y me entrega amor, divinidad, paz, y que con amor es que se construye una sociedad justa y no por intermedio de otro factor sobrenatural, ni por religiones u otro hecho de explicación oscura.
Amor, lealtad y mujer, por siempre desde mi pensamiento de hombre; son algunas de mis verdades o valores que procuro.
Saludos amigo.
05/02/12 04:02