Creo profundamente que la poesía (sea de carácter social, existencial, amorosa o de cualquier otra sustancia humana) es un acto de liberación que se convierte en libertario cuando nace de la entraña propia del alma humana. Nunca podrán los omnípodos dirigentes de la política, el negocio mercantil, las moralejas religiosas y otras especies de poderes fácticos ocultos o no tan ocultos entre las sombras de la intolerancia acabar con los poetas y poetisas que nacieron ya desde el mismo momento en que los pirmeros humanos y humanas se juntaron alrededor del fuego para cantar y contar historias de magia... porque poesía (cualquier que sea su género o temario) es un acto lúdico de libertarismo ausente de represiones y de prejuicios.
La poesía siempre es canto... y el canto acompaña a los humanos desde la profundidad de sus raíces genéticas. Si hay algo por lo que merece la pena sentir es por tener un poco, quizás sólo unas migajas, de poeta o poetisa... porque eso significa que la libertdad sigue existiendo.
Me quedo con todo tu texto. Me lo como todo entero, ya lo sabes.
Un abrazo.