Eres ese punto inacabable donde sueño
dueño
de este amanacer inabordable.
Eres lo que nunca alcanzo
pero avanzo
para poder alcanzarte.
Eres la inasible hondura del instante
caminante
cual mujer de un lugar imposible.
Y entonces...
cuando pienso en ti...
¿por qué te amo?
Espero que lo sepas
mirando al gorrión
que, suave, tierno, candoroso,
se hace vida a tu lado
y te brinda una sensación,
viento alado,
con aroma de canción...
y una humilde oración...
a tu cuerpo deseado.