Para ir socabando debilidades eludiendo puentes,
para esquivar las fronteras atrapando al salmón,
para reconocer al mesías inválido de sueños
para caminar sin rumbo desembocando en el río con los bolsillos vacíos...
El mar...
para q llore su pena la montaña cincelando epitafios que ahogan el gusto en el consuelo,
para disimular las tumbas de los héroes,
para creer en el horizonte
para escapar de las sirenas derramando lagrimas sin que se note...
Y siempre el mar...
para que lleve mis secretos hacia los acantilados de tus pestañas
y así poder comer manzanas
despues de haber nadado desnuda en el horizonte de tu cuerpo
para desafiar a la aurora de tus ojos que me miran sin ver,
derramando azules en los grises de tu adiós...