Sueños Disfrazados
Las luces de Los Ángeles latían fuertemente en mi corazón soñador para luego golpear con un latido más contra mi frágil pecho. Mis ojos brillaban ante las posibilidades que dibujaba en mi mente para luego recaer en la locura de un sueño extraviado. Seguí sintiendo con mis ojos ya cerrados, una vida más allá de la que estaba viviendo para hacer lo que mis pies no se atrevían: ¡escapar!.
El deseo de ser inmortal se apoderó de mi alma hasta engancharme en el anhelo de vivir más de una vida. Sólo soñaba con una gran pantalla para atraparme en un personaje en otro lugar o época o incluso fantaseaba con una habitación con vistas al mar para leer un hermoso libro o escribir uno.
¿Nunca has deseado un sueño improbable?.¡Yo sí!.
Por ello debes soñar lo que quieras soñar porque recuerda que el mejor experto en disfraces son los sueños al vestirse de imposibles. Así que, desnúdalos salvajemente hasta alcanzarlos porque no importa las piedras en tu camino ni la gente en contra ni el tiempo; simplemente sueña para vivir y vive para soñar.
