Cuando le vi por primera vez,
le quise para mí,
y soñé muchas cosas,
soñé con hacerle la mujer más feliz de universo.
Creí que para ello:
tendría que llevarle al cielo,
tendría que bajarle las estrellas,
tendría que obsequiarle todo el oro que existe.
Pero ya veo, "me equivoque":
no le lleve al cielo,
no le baje las estrellas,
no le obsequie todo el oro que existe.
Alguien,
simplemente
le quiere
locamente
“y usted es la mujer más feliz del universo”.
Sabes - ¡Vota por mi grabación!
Quizá la canción no tenga mucho que ver con el poema, o quizá si, pero, la pongo más que todo por que quiero compartirla con ustedes, no es nada agradable “quizá”… es que es mi primera grabación en “redkaraoke”, y todos aquellos que sepan de música se darán cuenta que es fatal, pero aún así, quiero compartirla con ustedes, prohibido reírse, eh!!!!!
oye que cosa tan cierta, a veces lo hombres piensan que para hacernos felices a nosotras las mujeres (esta vez te hablo como una mortal y no como la Diosa pagana que soy) nos hacen falta objetos materiales para autenticar amor. pero un los detallitos mas chiquis son lo que nos hacen felices.
me lo llevo a favoritos un beso.