Doña Elisa hace lo que puede y tiene mucho mérito que haya aprendido lo suficiente de informática para saber manejar uno de estos trastos, y sobre todo que se haya decidido a escribir. Muchas señoras de su edad no osarían hacer semejante cosa, ni pensarían en ello. Juan Ramón Jiménez, por ejemplo, se sacó de la manga escribir todo con jota y nadie le tosía. ¿Por qué? Supongo que porque era un afamado poeta. Para mi doña Elisa tiene más valor que el poeta de Moguer, y ya irá poco a poco aprendiendo y fijándose; y si no tampoco pasa nada, aquí todos la entendemos y la leemos encantados. Es un poco la madre de todos y la queremos muchos.
Mi querida Elisa, la abrazo de todo corazón y sepa que sus amigos estamos muy orgullosos de usted
Elisa:
Como dice mi amita, doña Elisa es casi la madre de todos nosotros y poco a poco irá puliéndose. Ya es un gran avance entrar a la internet y navegar en la página. Conozco muchos contemporáneos de ella que le tienen miedo a la computadora.
Un gusto leerte Elisa y que siga ardiendo la llama de tu interés por las letras.
Un abrazo.
Serge.
Me sumo a esos ánimos hacia nuestra madre Elisa. Es sorprendente que alguien de su edad se ponga delante de un ordenador y descargue su sentir. Admirable Elisa.
Cuando una persona está partida de dolor la ortografía es lo que menos cuenta.
Importa que se exprese y Elisa se expresa como nadie pide consuelo y tenemos el deber de dárselo.
Elisa, siento una gran admiración por ti y la valentía con la que te enfrentas ante la intolerancia.
Recibe mi abrazo con toda mi ternura.
eres un encanto mejorana te estoy muy agradesida por confiar en mi pues como beras lla ,,tengo ,86- año que me podeis pedir no todos piensa comotu pero se que la malloria estais con migo y eso para mi es un lujo te mando un beso y que dios os vendigas a todos
Elisa, Elisa, Elisita. Revisa tu ortografía. Un afectuoso saludo. Olga