En el fondo de aquel viejo cajón tu rostro sonreía detrás del polvo de una vieja fotografía. ¿Acaso era una señal de algo verte como hace diez años cuando me encontraba en plena mudanza después de mi separación?... Ya creo que sí solo que no pude verlo en ese momento, me límite a desempolvarte y recordar con amor esas vacaciones en la playa donde todo era perfecto.
Pasábamos los días riendo y disfrutando del sol, el mar y de no tener una vida de adultos convencional. No pasaba noche que no durmiéramos abrazados planeando nuestro futuro juntos, de cómo iba a ser nuestra vida una vez terminada la universidad.
Recuerdo que eras tan apuesto que disfrutaba mirarte dormido en las mañanas, observar tu piel bronceada, el pelo ondulado y revuelto, la tensión de tus músculos según la posición y aquella primera luz en los ojos cuando despertabas.
Si existen en verdad las almas gemelas de seguro tú fuiste la mía y sé que una parte de mí murió contigo esa noche en que los frenos de tu motocicleta fallaron y jamás volví a verte.
Pero ya sabes lo que dicen al final del camino todo vuelve a empezar.
Emme: El alma en estas palabras ,transmitiéndonos ese sentimiento de tristeza; pero que mejor final que el que has dado
la vida sigue , por eso al final del camino todo vuelve a empezar .
un abrazo
Tienes un facilidad para describir situaciones llenas de emociones que nos trasportas a ese momento preciso en el cual podemos imaginarnos la escena descrita.. una delicia poder leer tus cortos relatos...