¡Salve a la musa de los caídos!
Lilith, madre de los ángeles perversos
Beben en su honor esta copa
Libad con sangre y cantad sus versos
En el éxtasis del hexentanz bailaréis como sátiros
Reiréis en estos momentos como bacanales
cuando sabéis que no podéis caer más abajo del averno
¿Por qué llorar?
Si habéis caído en el mismo suelo de Luzbel
Si pisáis las cenizas de Sodoma y Gomorra
Si os quema la flama avernal
Si os oscurece la vista con azufre
¿Por qué llorar?
Si es vuestro destino, afrontadlo con risas
Cantad, bailad, embriagaros
Llevad la vida que os ha tocado
Si los secretos de la luna os han de tocar
¡Aullad como lobos!
Festín, haced un magnífico banquete
Que presida Baco este festín
Bebed y cantad, disfrutad el momento
Dad rienda suelta todos vuestros placeres
Ya es demasiado tarde para reprimiros
Vamos, si no alcanzáis la santidad id a la otra orilla
Caed ebrios de vuestros propios vicios
Saciados vuestros humanos instintos
Hastíados de desenfrenada orgía
Cansados de tan irrefrenable enajenamiento
Tan desposeídos y descontrolados
Las ninfas de tanta perversión se ruborizarían
¡Y avergonzados los sátiros se escandalizarían!