Se me escaparon las horas.
Y el tiempo a lo lejos ríe la estampida.
Andrajos de tedio con mortajas de indiferencia..
Y un ataúd es solo un recibimiento.
Si la muerte fuera el final, Aión no estaría a mi espera
Círculo del cual no puedo desprenderme.
¿En dónde el comienzo en cual el final?...
Solo queda esperar
No hay comienzo ni final, creo. Solo la vida que se extiende ante nosotros como un regalo o un castigo, depende de nuestros ojos y sobre todo de nuestro corazón. Un cordial saludo y gracias por compartir los escritos