Tu calor hondo me cautivó
como aquella morena del caribe
que al menear su cintura
masajeaba mi deseo.
Horno eléctrico, mi humilde horno
que reemplaza el antiguo barro
donde se consumía la leña.
¿Me convidas un poco de tu calor
cuando el desamor me hiele el alma?
¿Me preparas la mejor de las pizzas
la noche imposible en que ella cene conmigo?
Vamos, amigo, no me falles.
Que no se te corte la luz, y que a mi
el amor
amigo, el amor, no me corte en pedazos.
Muy bueno Fabio Saludos.