Pájaro sediento, triste de flores
¿puede la letra revivir a los muertos?
Alejandra, de la cara marcada
y la magia en las manos
¿pudiste arrancarle sus secretos al misterio?
Te ruego que vivas nuevamente
y me ayudes a escribir, por una vez, el poema.
Yo te amaba, como la noche ama la noche,
oscuramente, y callado.
Pero es tarde, y digo como si dijera,
vuelve a vivir, ¡te ruego que vivas nuevamente!
que amanece la razón de tu sinrazón
en la locura de mis huesos.
Bien Fabio, una evocación profunda, cargada de palabras. Una llamada al sentir y al sentido. Un gran saludo.