Esta tarde distinta entre las tardes
me duelen las aves, encerradas en el aire.
He logrado decir el vocablo no.
Y me he enfrentado al sustantivo muerte.
¿Qué importa que el suicidio me siga llamando?
del otro lado de mi aparente poema
se encuentran tus ojos
reales, vivos y distantes
y me sumerjo en ellos
como aves en el aire.