.-Las ideas constituyen el fundamento del mundo sensible.
Es un debate interesante. Yo, ante esta afirmación, niego la mayor.
En Platón, el conocimiento proviene efectivamente de la oponión, que es un grado del saber. Si yo observo una manzana roja a través de mis sentidos, CREO que esa manazana es roja. Confío en que mi sentido de la vista no me engaña y afirmo que es roja.
Mi afirmación no varía la naturaleza de la manzana. Bien podría ser verde pero mi percepción del mundo sensible (debido a su mal funcionamiento por enfermedad), me llevaría a jurar y perjurar que esa manzana en particular, es roja como la sangre, aunque ello no fuese del todo cierto.
Para ello necesitamos valores absolutos, Ideas.
Otro ejemplo. Mis sentidos se topan con un perro. Uno de los millones de perros que está en el planeta. Si me pongo a pensar en el perro juzgado por mi percepción, debo llegar a la conclusión de que no es real, no es un perro verdadero, sino una copia del perro único universal creado por un poder absoluto superior al hombre. Es un perro, sí, pero un juicio de valor previo me impide afirmar rotundamente y basandome en el conocimiento absoluto que me es imposible ejercer (dado que yo no poseo el saber absoluto) que ese perro sea un perro real, y diré por tanto, que se trara de una idea de perro que yo me formo. Pero claro, mi Idea no afecta tampoco a la naturaleza del perro. Supogo que el perro sigue siendolo a pesar de mí percepción.
Entonces debo llegar a la conclusión de que las Idas o Formas son representaciones que yo me formo del mundo sensible, o no son ciertas, o se crean desde el mundo sensible. Es decir, es la materia la que crea la idea (en nosotros), de la materia. Primero lo material, después su representación. Se trata, en todo caso, de un debate milenario al que solo cabe añadir opiniones, a favor y en contra.
Un saludo
29/06/12 12:06