Llevo toda la tarde
buscando tu aliento,
recogiendo tu estela,
nublando mi cielo,
suplicando tu llanto,
embriagando mi boca,
desandanto tus pasos,
reeanudando mis suspiros,
aullando tu nombre,
entrecortando tus silencios,
anudando mi miedo,
desatando mi cólera,
rasgando tus entrañas...
y recordando tu expresión
al inundar mi vida.
GERMÁN GORRAIZ LOPEZ