Una simple hoja de papel y un bolígrafo son suficientes para mover el mundo. O debo decir más bien, ¿un teclado y un ordenador?. El caso es que estos instrumentos nos ayudan a comunicarnos y a intercambiar opiniones, inquietudes y sobre todo sentimientos.
Desde que era un chaval recuerdo que me decían que el hombre se diferenciaba de los animales por la inteligencia que tenía éste y carecían aquellos. Pero viendo a mi perro a diario en casa y algunos hombres en la calle, me doy cuenta que esto no es cierto. Lo que verdaderamente nos diferencia de las bestias, son dos cosas: la capacidad de escribir y comunicarnos a través de las letras y la mentira.
Este maravilloso don de poder escribir, transmitido a través de esta maravillosa lengua (el español) hace que cada vez que lo hago, me sienta especialmente feliz. Cuando termino un texto y lo cuelgo en esta página o cualquier otra, lo leo y releo en varias ocasiones pues me gusta ver mis pensamientos plasmados en un medio tan universal y plural como internet. Un gran invento.