Cada día que ha ido pasando me dado cuenta de que puedo vivir sin ti, que no tengo necesidad de tenerte en mi vida que soy igual de feliz, pero un golpe es un golpe y quieras o no, duele y duele más cuando el sol se cae y la oscuridad se apodera del panorama, dejando al descubierto todas esas heridas que durante el día andamos camuflando, ya no me cogen nervios al vete, ya no me emociona oírte pronunciar mi nombre, supongo que he entendido que jamás hay que conformarse sabiendo lo que uno vale. Juraría que solo oír tu nombre me ponía los pelos de punta y los nervios se apoderaban de mí, ahora&. No se, eres alguien más con quien compartí grandes cosas y que en un momento dado se acabó y fin, sin más vueltas un acto de resiliencia donde he asumido que esta es y esto es lo que me ha tocado, y no por eso me voy a deprimir ni mucho menos, si no que en el momento de la tormenta es cuando las águilas despliegan sus alas y vuelan mas lejos.

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