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El Whisky Ilegal y Los Afamados Gangster

Mi nombre es Harry. Avanza el invierno de 1921 y a raíz de la muerte de mi tío Steven, acaecida recientemente en donde habitamos, las montañas de los Apalaches, Pennsylvania, me ha tocado el continuar con la producción del Moonshiner y velar por la viuda y mis 3 primos: John de 7 años George próximo a los 12 y Alice, una espigada rubia de 20.

Tío Steven cayó abatido por las balas de las autoridades, en un confuso episodio registrado en una conocida taberna, punto obligatorio de parroquianos, jugadores y tahúres de toda índole, los fines de semana.

El whisky es una de las pocas fuentes de ingresos en dinero que tenemos los montañeros. Los dólares lo distribuimos en la compra de azúcar, carne, harina, granos, pólvora y munición, de los trenes de carga que llegaba periódicamente. La vida transcurría con austeridad ceñida por la gélida ventisca.

A la edad de 16 conocía todas las fases del proceso, incluyendo las tretas para la venta del licor. Esto era considerado ilegal de acuerdo a las leyes de la nación. La corrupción reinaba en todo el país, no sentía culpa alguna, había que comer y sin alternativas. La competencia entre productores no revestía enemistad y en la unión estaba la fuerza. Las redadas regulares de los agentes federales precisaban de la colaboración de todos los vecinos en estar alerta y organizados nos turnamos la vigilancia de caminos para detectarlos. No obstante, siempre había algún informante anónimo en la comunidad y las autoridades al enterarse, enviaban un alguacil, ocurriendo frecuentemente que solo se limitaban a citar al infractor el cual bajo palabra jurada se presentaría puntualmente a la corte, donde solo era multado. Por lo general, el funcionario almorzaba junto a la familia y entre risas se despedía, seguían siendo amigos y el proceso revestía total cumplimiento de la norma, posteriormente el oficial recibía una cuota de 5 dólares por tarea realizada y eventualmente 10 dólares si ocurría algún decomiso de whisky o cerveza y 5 dólares más por el Kg. de cobre de alguna destilería desmantelada. Dicho cobre luego desaparece de las arcas del fisco.

Es la época de la severa ley seca, cero bebidas alcohólicas.

Alice se perfilaba idónea en la continuidad del negocio. Despierta e inteligente comprendió su papel, la tristeza voló pronto de su corazón, y al estar estrechamente vinculada a mí, creció su cariño, naciendo el deseo de poseerme en sus solitarias noches de ardientes sueños, en donde desataba la furia lujuriosa que poseía; en cambio, mi estimación por ella tenía la ingenuidad propia del adolescente campesino debutando a adulto, por ahora solo los lazos que yo sentí era ante la disyuntiva presente y mi sentido de responsable colaboración.

La rutina varió poco, nos repartimos los oficios; la tía Jane se encargaba del hogar, hacer la comida, elaborar, coser y mantener la ropa, la lencería, más otras labores de gran responsabilidad; los pequeños alternaban su tiempo libre entre hallar leña, supervisar la granja, cazar aves, animales silvestres, o pescar en el cercano río y el resto del día ir a la escuela del poblado.

Nuestro whisky tenía gran demanda en el gusto de los entendidos, había factores que lo hacia ya el mejor de la región. Tío Steven había quitado poco antes de morir, todo lo que fuera de cobre en el alambique, sustituyéndolo con acero inoxidable. El agua empleada procedente del río, cristalina y potable, como precaución era filtrada 2 veces, y el maíz de insuperable calidad, dorado intenso y grandes granos.

El proceso Moonshiner - Harry, no tenía nada que envidiar a las mejores destilerías escocesas, llámese Buchanan, Old Parr etc. Estábamos a su altura y prestigio. Lo de agregar Harry salió de un chiste de un borrachito de la localidad, cosa que aumento la fama de la empresa.

Comenzó en breve una etapa de florecimiento no conocida anteriormente, el dinero fluía diametralmente opuesto a la presencia de las autoridades, la razón sencilla; nos encontrábamos en una zona alta, escarpada y de bosque tupido, donde solo se transitaba a duras penas en mula por peligrosos senderos.
La producción del whisky era comprada directa y totalmente por los representantes de los gangster más renombrados, apreciaban su extraordinaria calidad y llegaba a su destino sin mayores dificultades, donde era servido primeramente en cantidades generosas en los frecuentes bacanales de los afamados bandidos de Chicago.

Con la holgura presente, Alice dedicó más atención por mi, su carácter posesivo y la falta de chicos en el entorno, me hizo centro de su amor y caricias y una noche, a la orilla del río canté con mi guitarra...

*... Déjame comer cuando tenga hambre
déjame beber cuando esté seco
un dólar cuando esté mal de dinero,
la religión, cuando muera
el mundo entero es una botella,
y la vida una copita.
Cuando la botella se vacíe
seguro que no valdrá nada...

Me enseñó a amarla, se desnudó ante mis ojos mostrando sus espléndidos atributos con la grandiosidad de una estrella e inmediatamente se regó de hormonas mi cuerpo, al responder a su ardor pisé la guitarra, saltaron las cuerdas me quedé sin instrumento, pero con Alice y ya nada me importó...

Los días siguientes continuamos amándonos con mucha intensidad y al mes siguiente estaba embarazada.
Tía Jane se alegró muchísimo y se inauguró en la actividad de abuela, tejiendo la ropita del futuro retoño, al igual que mis primos todos contentos. La felicidad iluminó aquel bucólico rincón.

... Han pasado dilatados años, nuestra hija ha crecido, se parece a su madre. La fortuna nos ha acompañado en todo aspecto, particularmente lo económico.
Y siempre cuidadosos, nunca dejamos rastro de nuestro oficio, algún fragmento de ladrillo por ejemplo, daría pista de que cerca hay un horno, o una bolsa vacía de azúcar olvidada en las adyacencias... no, nada, tomamos precauciones extremas y hace un año, nosotros y 4 de nuestros vecinos hemos optado por mantener todo bajo tierra en galerías, que en colaboración entre todos, nos hemos hecho.

La prensa llega cada semana abajo, en el pueblo y me he dado cuenta de la podredumbre que arropa todo el territorio de nuestra nación, jueces sobornados, senadores corruptos y el mismo presidente no actúa, la banda de Al Capone asesinando, criminales por doquier, violencia en las cantinas en los salones de juego, muertes atroces, sicariato, escenas sangrientas por contratado de aguardiente desde México y Canadá...

No deseo que mi hija crezca en este desastre, me aterroriza, ambiente en el que paradójicamente somos parte causante... mis familiares tampoco desean continuemos aquí. Hay un posible comprador de nuestras propiedades y ya gestamos los pasaportes y visas para trasladarnos a Sur América. Quiero otra vida, otra oportunidad en un ambiente virgen, posiblemente Venezuela.

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*Fragmento de "Moonshiner", autor: Bob Dylan.
Indigo14 de mayo de 2013

14 Comentarios

  • Jasmin23

    Gran imaginación y particular manera de decir.Buscar nuestro estilo es la pugna que tenemos con nosotros mismos. Saludos

    15/05/13 10:05

  • Indigo

    Gracias jasmin, lo extraño es que la parte interesada nada dijo ni por privado.

    16/05/13 07:05

  • Jasmin23

    Por supuesto, la parte interesada algo dijo, Lo extraordinario del relato

    18/05/13 12:05

  • Indigo

    Hola Soloalma, entonces como dices, lo escrito queda para satisfación propia y de los amigos, fué un agradable ejercicio sin que importe la idea que lo generó.
    Gracias por tus apreciadas consideraciones.
    Con afecto, un beso.

    19/05/13 06:05

  • Indigo

    Jasmin, la parte interesada me refiero: La chica que solicitaba colaboración con el tema Moonshiner ¿Recuerdas? Nada ha dicho sobre esto y otra posible colaboración ofrecida-recibida.

    19/05/13 06:05

  • Jasmin23

    Imagínate no fue agradecida, en un futuro nadie la ayudará. Los compañeros son para eso para ayudarnos, Yo le pedí la colaboración al escritor Samuel porque me fascino su literatura y no quiero ser egoísta los quiero llevar a mi aula y que mis alumnos se deleiten, como una vez hicieron mis profesores conmigo. Saludos

    20/05/13 04:05

  • Indigo

    Justamente confirmas lo que practico, me gusta intercambiar pareceres y si está a mi alcance contribuir, lo hago con gusto y esmero. Por eso surgió lo último escrito.
    Nos vemos.

    21/05/13 08:05

  • Mejorana

    Es un relato que se lee con gran interés, Indigo.
    Qué pena me ha dado la guitarra, ya no podrá cantar intensas aventuras aunque de todas maneras acaba en un final feliz.
    Un ambiente virgen en Venezuela.
    Me alegra leerte, Indigo.

    22/05/13 07:05

  • Indigo

    La guitarra se transformó en humus, y a Alice no la encuentro ni por aquí. Parece que soñé el relato jejjeje.

    Gracias amiga por compartir.

    23/05/13 04:05

  • Villarey

    He pasado a imprimir tus textos y me han servido para que mi viaje en metro esta mañana me sea mas ameno.


    Un saludo
    Alvaro Villa Rey

    23/08/13 03:08

  • Indigo

    Menuda sorpresa que sea así, muchas gracias.
    No ocultaré que comentarios así elevan el ánimo.
    ¿Y por qué no decirlo? El ego tambien.

    Salud Villarey.

    27/08/13 08:08

  • Danae

    Resulta curioso que en principio hayas enclavado este relato en uno de los estados más puritanos de USA. O no. De hecho, nada bueno se "destila" del fanatismo. Y luego, ese salto de lo puritano a lo realmente puro, Venezuela.
    Se lee con mucho gusto y soltura este texto, que como siempre, está lleno de imágenes sugerentemente líricas junto con destellos de humor a veces negro.
    Muy, muy entretenido y ameno.
    Chapeau.
    Un enorme abrazo.

    30/08/13 12:08

  • Indigo

    Saludos querida amiga.

    Lo del lugar surge de una de las tantas páginas consultadas para amar el relato. En su momento en una de ellas se especificaba a las montañas Apalaches y en ese mismo estado; Pennsylvania. Ahora revisando en la web, la acotación leída incluye esa localidad al igual que otros estados. En aquella ocasión cuando hacía el bosquejo y acuérdate que yo soy Harry (algo ancianito hoy en día) el sobrino del tío Steven, y la descripción que leí del paraje elegido me pareció tan romántico como para ubicar la historia. De todos modos podemos mover el alambique y el resto de los corotos un poco más allá jkajajajaj!
    Lo de mi país es que no todo es "Made in USA".

    Y si, lo del humor destilando a negro es parte de mi naturaleza, algo innato y gracias a ello, una herramienta capaz de derribar hasta sólidos mitos.
    Me place la atención prestada y lo positivo que apreciaste en conjunto.
    Yo también ante ti, Chapeau.
    Sonoros besos.




    30/08/13 03:08

  • Indigo

    Por cierto cuando revisaba ahora, encontré este curioso mensaje de un político puritano y senador, por aquellos años en USA a punto de aprobar la "ley seca"...

    “Esta noche, un minuto después de las doce, nacerá una nueva nación,” declaró el Senador Andrew Volstead, impulsor de la nueva norma, con optimismo. “El demonio de la bebida hace testamento. Se inicia una era de ideas claras y limpios modales. Los barrios bajos serán pronto cosa del pasado. Las cárceles y correccionales quedarán vacíos; los transformaremos en graneros y fábricas. Todos los hombres volveran a caminar erguidos, sonreirán todas las mujeres y reirán todos los niños. Se cerraron para siempre las puertas del infierno.”

    Me pregunto; ¿Han cambiado en algo los modales de los estadounidenses actuales?

    30/08/13 03:08

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