Posada mi frente sobre tu losa,cubierta por la rosa crecia de tu muerte,
lloro en la olorosa frescura del ambiente,teñido suavemente
de una pálida luz hermosa.
Recordando tiernamente tu imagen tan graciosa,mirando esplendorosa
al color del sol naciente,dejo un adiós con el beso más fuerte
de mi boca dolorosa,sobre la caprichosa rosa guardiana de tu muerte.