Tú,
en Enero con el comienzo de los niños del colegio,
con el viento gélido susurrando tu nombre en mis noches frías.
Tú,
Durante Febrero y sus tardes de tormenta mojándote conmigo
cada poro de tu piel y el alma en sus veintiocho días de amor y entrega.
Tú,
llegando Marzo al comienzo de la florida primavera
y con ella el manto colorido que envuelve nuestros campos.
Tú,
atravesando Abril de mi mano con tardes soleadas
iluminando nuestra vida y calentando nuestros corazones.
Tú,
mientras Mayo acontece entre el fluir del río y la luz del sol
en sus días más largos y sus tardes eternas mirandote los brillantes ojos.
Tú,
apenas sin ropa caminando por Junio y la llegada del verano
que trae consigo aventuras, emociones por vivir y noches por sentir.
Tú,
en el mes de Julio bañandote conmigo en las playas arenosas
observando mezcla del color ocre arena y azul ola, comiéndome la boca.
Tú,
atardecer de Agosto, cálidas tardes, tórridas caricias bajo el sol
enamorándote del color de mi piel mientras yo voy besando la tuya.
Tú,
y llega Septiembre, con la vuelta del frío en las tardes
obligando a envolver los cuerpos con capas de ropa en la calle.
Tú,
comienzo de Octubre observando a los árboles desprendiéndos,
de sus bellos vestidos de hojas rojas, quedando desnudos ante mí.
Tú,
durante Noviembre con tardes al lado de la chimenea
calentándonos el alma entreteniéndonos con los cuerpos en el sofá.
Tú,
Diciembre y sus fríos invernales, los primeros copos de nieve
con los muñecos, y sus regalos de Navidad y los besos bajo el acebo.
Tú,
durante doce meses al año,
durante trescientos sesenta y cinco días al año.