Se volvieron amargas
las palabras en mi boca,
dejando un sabor
gris ceniza.
Busqué en mi paladar
esperando encontrar
la dulzura añeja,
y no encontré los sonidos
que fueron campanas
de júbilo de otros días.
Se secó la fuente,
la luz murió exhausta.
El aire de mis pulmones
suena a viento en el páramo,
estéril, yermo,
que solo el polvo levanta.
Los surcos de mi cara
recorren salobres perlas.
¡Cuánto más negro es el luto
por la vida que no es mas
que muerte en vela!
Languidece la poesía
trocada en endecha
que plañe sin consuelo.
Se oscurece el espíritu,
se funde con las sombras
en esta aciaga hora,
espectro de sí mismo.
Las palabras amargan en mi boca.
Juca versos pronfundos.
Transpasa el sentimiento cuando se te lee!!
Saludos para vos!!!