Estoy seguro que te parece una locura decirte que no tengo miedo a echarte de menos.
No tengo miedo a echarte de menos porque sé que con todo lo que somos vas a volver, porque si no lo hicieses sabría que no te quiero.
No tengo miedo a las distancias, te has encargado de convertirlas en pocos centímetros, tampoco tengo miedo al paso del tiempo, a tu lado las horas se convierten en minutos, y aunque así sea, esos pocos minutos, son a tu lado.