En el mar de la penumbra
en donde solo me cobija
esta fría y absurda realidad
que me ata de pies y manos,
apiádate de mi.
En este bosque viejo
y desolado, arrasado
por un fuego lleno de rabia
que me quema hasta el alma,
apiádate de mi.
En la mas alta montaña
donde se ahorcan mis pensamientos
y donde en una profunda caverna
que dificulta el respirar,
apiádate de mi.
En esta época de ruina y caos
donde cada latido duele
y donde un estallido
quiebra mi piel para herirme por dentro,
apiádate de mi.
Apiádate de mi, ayúdame a salir,
dame ganas de vivir, no quiero morir
entre escombros de problemas
que me atormentan, por favor
apiádate de mi...