Torpe Corazón
En días como hoy, es difícil ignorar al corazón,
Vivo, pero no estoy viviendo, tengo un vacío constante en el pecho, aquel que busco reprimir cada día, hasta que ya no puedo hacerlo más.
Me recuesto en mi cama, y pienso, que fue lo que faltó, que hice tan mal, por qué yo no merecía tu amor...
y recuerdo, aquellos momentos en que yo era feliz; recuerdo como me gustaba acariciarte,como me llenaba el corazón que me besaras, como me alegraba totalmente la vida un "Buenos días amor" de tu parte.
Y las lágrimas caen, son tontas, no entienden que entonces toda esa felicidad, disfrazaba un gran dolor.
El dolor de tu indiferencia, de tu rencor, tu odio, tu constante venganza hacia alguien que no hizo más que amarte y entregarte todo lo que tenía de si, sin titubear, sin dudar ni un sólo segundo.
Y es tan masoquista el corazón, que por momentos desea vivir mil veces tu indiferencia por, aunque sea un segundo de tu amor.
Un segundo de ese amor que resultó siendo una mentira.
Esa mentira que dejó miles de puñales en mi alma.
Aquella que me hiere cuando pienso en las cosas que amaba de ti y también cuando pienso en lo déspota que fuiste conmigo.
Esa que también hiere cuando recuerdo cual poesía era tu "alma" para mi corazón y así mismo hiere con el gran ruido de tu ausencia.
Una ausencia que siempre estuvo presente pero que yo excusaba como torpeza.
Cuando la torpe, siempre fui yo.
