Comenzó hermosa melodía,
puesta en escena instrumentos,
llego la orquesta para la poesía,
cordófonos españoles entraron
y membranófonos le siguieron,
idiófonos alegres mexicanos
brindaban a la par de aerófonos italianos.
Quince violines a gran voz
acompañados de líricos cellos,
un enorme contrabajo
daba tono agudo a los vientos.
El piano dio su hermoso solo,
cuando su viejo padre el clavicémbalo
acompañado de guitarra y piccolo
termino gran preludio
y comenzó tenue fuga.
La orquesta para la poesía
exigió el cántico de las arpas,
mientras a bemol la lyra
prendía el camino de las flautas.
Y se hizo la tuba amigo del oboe
mientras afinaba a sol el saxofón
acompañada por triste clarinete
y tambor galano percusión.
La celesta grito orquesta
y la poesía se envolvió
en el arte de la música
y la melodía de las palabras
se dio en armonía de las artes
terminaron cantado acampanales .