Dando un paseo por la ciudad y el frío viento clavándome en el rostro,mantenía despierta mi cabeza, y aunque no era de esos días buenos en los que te apetece hacer cualquier cosa, tampoco era un mal día, pero para qué nos vamos a engañar cuando tienes un vacío , los días malos no los llenan,ni los buenos siquiera.
Y me preguntaba constantemente la fuerza que tiene el amor sobre ti, cuando apenas tenía quince años soñaba con toparme un príncipe que no me saliera sapo y cómo sería el amor de mi vida, pero cuando crecí descubrí que el amor de mi vida no es aquel que me sale sapo o príncipe si no aquel que quieres cuando tiene días de príncipe pero más aun le quieres en sus días de sapo, y entonces en ese momento supe que estaba preparada para dar el paso, aún seguía paseando y pensando que pronto llenaría mi vacío, y dirán que tonta, tener ese vacio por no verle apenas una semana.
Creelo, si amas no hay límites, y por muy poco tiempo que sea lo extrañas, después de esa reflexión que me costó una semana vacia, voy a dar el paso sí estoy dispuesta a entregarle mi vida.
Te deseo mucha suerte, sólo recuerda que además de sapos y príncipes, hay errores y decepciones... todo es parte de la vida, pero nunca dejes de amar...
